Reseña: 300

Acción/Drama/Bélica/Épica

¿Quién iba a pensarlo? hace unos 17 años te encuentras trabajando con uno de los atletas más famosos del mundo para descubrir sus encantos histriónicos, en el 2004 estás filmando una película de zombies utilizando un viejo guión del maestro del gore George A. Romero, y un par de años después te enclaustras en un estudio canadiense completamente pintado de azul para filmar una de las películas épico-bélicas más impresionantes de los últimos tiempos.

No cabía más testosterona en este póster.

Con estos antecedentes puedes afirmar que estás dentro de las "grandes ligas" de Hollywood; A esa altura se encuentra Zack Znyder, director del "blockbuster" del momento, 300.

Basado en una novela gráfica (no precisamente de la "verdadera" historia) del recién valorado Frank Miller (quien hace más de diez años le daba vida en papel al hombre murciélago), 300 cuenta la historia de un antiguo pueblo griego forjador de guerreros que se ve amenazado ante el paso de un poderoso hombre-dios Persa y su ejército de millones, que les ofrece clemencia y tolerancia si sus caprichos tiránicos e imperialistas son llevados al pie de la letra.

Es aquí, donde un grupo de 300 de los mejores guerreros de este pueblo se rebelarán y enfrentarán no solo a un ejército que los rebasa en número, sino al peligro de que su descendencia perezca y sus esposas sean esclavizadas y tratadas como inferiores bajo el mando de este auto-proclamado hegemón. 

La composición y estética visual del filme se la debemos en gran parte a Frank Miller.

Altamente criticada y tachada de "predecible" y hasta "graciosa", 300 es una descarga indecente de efectos especiales. Utilizando tecnología de punta y un altísimo nivel de creatividad, las escenas de acción son inolvidables. Creando un bizarro "baile sangriento", la cinta juega con el espacio-tiempo y nos presenta algo que desde los trabajos de los hermanos "Wachowski"(Matrix) no presenciábamos.

Algo que resulta curioso de analizar es que 300, por un lado es la "inocente" relación que podemos hacer de la también llamada históricamente "Batalla de las Termópilas" con la situación actual de Estados Unidos y su guerra en Irak. El filme trata de hacernos pensar que los guerreros son los "protectores de la sociedad" y convierten a la guerra en algo grandilocuente y digno de aplaudir, cuando más bien esta actividad es una gran contribución de un gobierno brutalmente violento, opresor y retrógrada.

En otro ángulo del filme podemos ver a la mujer ahora tomando planos más profundos e importantes dentro de la política, cosa que viene siendo un "plus" para que las cinéfilas feministas se sientan halagadas.

Con el hecho de que la cinta está basada especificamente en una novela gráfica y no en lo que se supone sucedió realmente hace más de mil años, fue un buen pretexto para mutilar la historia a juicio de los escritores y claro, de las grandes productoras que lo que les importa son las ganancias en taquilla.

Aún así, 300 es una experiencia audiovisual difícil de comparar, y una historia que también habla del honor, del trabajo en equipo y de valores que esta sociedad cada vez más rapido olvida.

(Reseña publicada originalmente en 2007)